Julio 2006 - Año 3, No. 5

De frente con Cecilia Bailey

Esperanza Huerta/RECREARTE

Nació en Guatemala, es ingeniera industrial y profesora de enseñanza media en matemática y física. Está casada y tiene dos hijos. Administra su librería, La Torto, además de editar libros de texto y materiales educativos. Actualmente preside la Gremial de Editores de Guatemala, entidad organizadora de la cuarta Feria Internacional del Libro en Guatemala y, por este año, también, de la décima Feria Internacional del Libro en Centroamérica.

Cecilia, ¿cómo es que has llegado a presidir la Gremial de Editores de Guatemala?

En la gremial represento a Editorial Sur, S. A., en donde laboro desde hace 6 años. Desde hace tres años soy vice presidenta de la Gremial y este año fui electa presidenta por la asamblea. En la Gremial siempre me interesó involucrarme en la organización de la Feria Internacional del Libro así como participar en distintos proyectos, algunos en el sector privado y otros en el sector público. He representado a esta institución ante Conalibro, que es una instancia del Ministerio de Cultura. Considero que durante varios años tuve la suerte de aprender más del mundo del libro por estar cerca de personas de mucha experiencia que han estado en este ambiente por muchos años.

¿Quiénes integran la Gremial?

La Gremial está integrada por 24 editoriales. Hay editoriales extranjeras con operaciones en Guatemala como es el caso de Grupo Editorial Norma, Santillana, McGraw Hill, Fondo de Cultura Económica; así como también, editoriales nacionales que se dedican a producir diferentes tipos de libros.

Cuéntame un poco de los inicios de la FILGUA, cómo y de dónde surgió.

La feria nace en el año 2000. Organizada siempre por la Gremial de Editores, que en aquel entonces estaba conformada por nueve editoriales aproximadamente. La idea de una feria internacional es poder presentar al público una oferta editorial bastante grande y variada. Esto es una practica usual en otras regiones del mundo. Es la oportunidad para que todos los libros nacionales se presenten ante un público numeroso.

Este año se conjugan dos magnos eventos en el país, la X FILCEN (Feria Internacional del Libro en Centroamérica) y la IV FILGUA (Feria internacional del Libro en Guatemala), la responsabilidad, sin duda, será doble. ¿Qué esperas de todo esto?

Que sea el evento cultural más grande de este año en Guatemala. Que sea un espacio en el que chicos y grandes puedan encontrar actividades de su agrado. Uno de los mayores retos es el de lograr una asistencia de 50 mil personas aproximadamente, por lo que esperamos que las actividades culturales que están planificadas logren captar el interés de los guatemaltecos. Por otro lado, al seruna feria centroamericana, tenemos como objetivo contar con la presencia de diversas editoriales de la región, esto nos compromete a financiar a muchas de estas empresas para que logren venir los 10 días de feria. Lograr este financiamiento es uno de los grandes retos que tenemos como organizadores.

¿Qué nos ofrece la Feria en esta edición?

Entre las actividades más relevantes tendremos el Encuentro de Escritores Centroamericanos, un simposio internacional de literatura infantil, un encuentro nacional de casas de cultura; diversos foros sobre edición en idiomas mayas, y presentaciones y firmas de libros. Hemos considerado que las actividades de los autores provenientes de la región no se limiten al recinto ferial; se llevarán a cabo aproximadamente 40 charlas en secundarias y universidades con la participación de un escritor residente en Guatemala y un escritor procedente del exterior.

Tengo entendido que también la música estará presente.

Así es. Una de las particularidades será la fusión de la literatura y la música. Habrá un concierto dirigido a niños y jóvenes donde el público compartirá al mismo tiempo sonidos, palabras y emociones. Contaremos con la presencia del maestro español Fernando Palacios, reconocido compositor y narrador de cuentos musicales, y con la Orquesta Sinfónica Juvenil dirigida por el maestro Igor Sarmientos. Debo mencionar que esto será posible gracias al apoyo del Foro Latinoamericano de Educación Musical (FLADEM).

Se dice que en la mayoría de nuestros países latinoamericanos la gente lee en promedio 1.5 libros al año; sin embargo, en las ferias de libro mucha gente acude a comprar textos y asiste a los eventos culturales que ahí se presentan, ¿cómo explicas este “fenómeno”?

Podría pensar que esto ocurre debido a que las personas que asisten a estas ferias encuentran gran diversidad de libros en un solo lugar. Por lo general en las ferias se manejan descuentos, y esto convierte al libro en un artículo más accesible. Además las actividades culturales que se realizan dentro de la feria son totalmente gratis, por lo que las familias pueden pasar buenos momentos de entretención sin que éstas recarguen sus presupuestos.

¿Cuál es la función principal de una feria del libro?

Es hacer que los libros sean accesibles a la mayoría de la población, tanto en diversidad de oferta, como en precios. Una feria es una invitación a la cultura, a la diversión, a la lectura. Otra de las funciones es brindar la oportunidad de que participen editoriales extranjeras que tienen libros que usualmente no encontramos en el país.

¿Por qué esta feria se ha enfocado a la niñez?

El lema de la gremial es “Vamos por un país de lectores” así es que decidimos que dedicarnos a la niñez era un primer paso para empezar a trabajar en este sueño. Creemos que si los niños desde pequeños se enamoran de los libros, este amor les durará toda la vida y tendrán garantizado un mundo más amplio y mejor.

FUENTE: www.revistarecrearte.com